La titular de la Casa Rosada, Cristina Fernández de Kirchner, acusa a su antecesora de no haber tomado medidas para evitar la situación que rodeó al fallecido fiscal Alberto Nisman.
El exsecretario de Seguridad se enfrenta a cargos por no haber protegido la evidencia. En un momento clave de la investigación, atribuyó la responsabilidad a la funcionaria que lideraba el caso.