El agua de botella no es tan limpia como se cree: investigadores descubren que contiene microplásticos

Uno de los principales motivos por los que se elige el agua embotellada es la percepción de que es más saludable. Sin embargo, la realidad es muy diferente a lo que se creía.

Por InfoArticulos

Sábado 22 de Febrero de 2025 - 15:30

El agua de botella no es tan limpia como se cree: investigadores descubren que contiene microplásticos. Foto: Redacción InfoArticulosEl agua de botella no es tan limpia como se cree: investigadores descubren que contiene microplásticos. Foto: Redacción InfoArticulos

Una de las principales razones por las que las personas prefieren el agua embotellada es su mejor sabor y olor, además de otros factores relacionados con la salud, según un estudio de la Universidad Autónoma de Barcelona. Sin embargo, el agua embotellada no solo es más cara que el agua del grifo, sino que también contiene microplásticos, que pueden ser perjudiciales para la salud humana.

Un litro de agua embotellada puede contener hasta 240.000 fragmentos de plástico detectables, lo que es diez a cien veces más que las estimaciones previas. El 90% de estos fragmentos son nanoplásticos, que tienen un tamaño igual o inferior a 100 nanómetros.

Los investigadores encontraron que el polipropileno tereftalato (PET) es uno de los plásticos más comunes en el agua embotellada. Este material se utiliza para hacer las botellas y puede desprenderse al apretar la botella o al exponerla al calor.

Además, se detectaron 28 aditivos plásticos en el agua embotellada, mayormente estabilizantes y plastificantes. Tres de estos plastificantes presentaban un mayor riesgo para la salud humana y deberían ser considerados en los análisis de riesgos para los consumidores.

Es importante recordar que la presencia de microplásticos en el agua embotellada no es solo un problema para la salud humana, sino también para el medio ambiente. Los microplásticos pueden contaminar el suelo y las aguas subterráneas, lo que puede tener consecuencias graves para la biodiversidad y la calidad del agua.

En resumen, aunque el agua embotellada pueda parecer una opción más saludable que el agua del grifo, en realidad contiene microplásticos que pueden ser perjudiciales para la salud humana y el medio ambiente. Es importante tomar medidas para reducir la cantidad de plástico que se utiliza en las botellas y para promover la reutilización de los envases.