Un mes después del enlace, la pareja comenzó a sentir una desconexión: "¿Eres tú de verdad o solo finges?"

Un noviazgo consolidado no es garantía de nada, porque el tiempo pasa y a veces se presta más atención al deber ser que a los sentimientos.

Por InfoArticulos

Viernes 23 de Mayo de 2025 - 06:26

Un mes después del enlace, la pareja comenzó a sentir una desconexión: "¿Eres tú de verdad o solo finges?". Foto: Redacción InfoArticulosUn mes después del enlace, la pareja comenzó a sentir una desconexión: "¿Eres tú de verdad o solo finges?". Foto: Redacción InfoArticulos

Agustina y Mariano se conocieron en una noche lluviosa. Ella había ido a salir con sus amigas, pero la lluvia los hizo cancelar su plan. En lugar de quedarse sola, Agustina decidió ir al bar donde Mariano estaba esperando a un amigo que no llegaba. Allí se conocieron y se dieron cuenta de que tenían mucho en común. Después de una noche divertida, intercambiaron números de teléfono y se despidieron. Al día siguiente, Mariano le envió un mensaje preguntándole si era de verdad o si se había inventado su nombre. Agustina se sintió atraída por él y aceptó salir con él. La primera cita fue una cena en Kansas y luego jugar al bowling. En la tercera cita, Mariano besó a Agustina por primera vez. A los pocos meses, Agustina decidió cancelar su viaje de intercambio a Londres porque no quería estar lejos de él. En abril, Mariano la acompañó al casamiento de la hermana de Agustina. Un año y medio después de conocerse, Agustina y Mariano se casaron en el mismo salón que ella había reservado para su primer casamiento con otro hombre. La historia de Agustina y Mariano es un ejemplo de cómo un encuentro casual puede convertirse en amor verdadero.