El sakuramori más emblemático del país es Tóemon Sano, cuya impresionante historia de dedicación y legado es un ejemplo a seguir.
Por InfoArticulos
Sábado 24 de Mayo de 2025 - 15:12
Un anciano jardinero de 97 años cuida con dedicación los árboles más icónicos de Japón.. Foto: Redacción InfoArticulos
La familia Sano ha sido guardiana de los cerezos en flor de Kyoto durante más de 400 años. Tadashi Sano, el actual sakuramori, es un hombre tranquilo y humilde que se despierta a las 4:30 am cada mañana para cuidar de los árboles. Su trabajo consiste en asegurarse de que los cerezos estén bien cuidados y que crezcan sanos y fuertes. También tiene la responsabilidad de preservar la tradición de los cerezos en flor, que es una parte importante de la cultura japonesa. Tadashi Sano ha dedicado su vida a cuidar de los árboles y ha sido reconocido por sus esfuerzos para preservar la belleza natural de los cerezos en flor. Su familia ha estado involucrada en el cuidado de los árboles durante más de 400 años, y Tadashi Sano está orgulloso de seguir esta tradición. A pesar de su importancia cultural, los cerezos en flor son también una fuente de ingresos para la familia Sano. Cada año, miles de personas visitan el jardín de los cerezos en flor para admirar su belleza y disfrutar del ambiente tranquilo que rodea a los árboles. La familia Sano también vende productos relacionados con los cerezos en flor, como té y dulces, lo que les permite mantener la tradición de cuidar de los árboles. En resumen, Tadashi Sano es un hombre dedicado a preservar la belleza natural de los cerezos en flor y a seguir la tradición de su familia. Su trabajo es importante no solo para la cultura japonesa, sino también para la economía local.