Un giro hacia el nacionalismo, las frustraciones económicas y la reacción contra el ideario woke están llevando a amplios sectores de la juventud hacia líderes de la extrema derecha, según se desprende del análisis de las redes sociales.
Por InfoArticulos
Sábado 26 de Abril de 2025 - 04:00
¿Qué hace que muchos jóvenes se sientan atraídos por la ideología de la derecha extrema?. Foto: Redacción InfoArticulos
El papel fundamental en la adhesión joven al discurso de la derecha extrema, aquí y en otros países, lo cumplen las redes sociales. Fue el medio que eligió Milei, un outsider de la política, para convocarla. Así, el Presidente logró aprovecharse de un espacio que, en un proceso acelerado por la pandemia, se ha convertido en el nuevo ágora, un espacio ideal para estimular la polarización y la apelación a las emociones con las que hacen política estos líderes disruptivos. Por otro lado, las redes convierten a todos en actores políticos. “Si en la década de 1970 se decía ‘todo es político’ –recuerda la socióloga Liliana De Riz—, ahora hay que decir ‘la política es de todos’. A través de las redes, hoy la gente entra en el flujo diario de la política y encuentra el modo de expresarse”. Los más efectivos en esta nueva arena pública se convierten en influencers. De Riz, que acaba de publicar Laboratorio político Milei. Primer año en el sillón de Rivadavia (Ariel), habla de una transición de la política de partidos a una política de influencers. En este nuevo esquema, explica, la política deja de tener el monopolio de lo público, pero con el riesgo de que, dado el alcance de las redes, las voces que surjan a través de ellas tengan una capacidad de manipulación aún mayor. Esa manipulación puede traducirse en fake news, señala Vilker, lo que priva a los ciudadanos de la información y la transparencia necesarias para conocer en profundidad lo que sucede en el ámbito público. O, como menciona De Riz, abre la posibilidad de que “ciertas emociones y furias se conviertan en opciones políticas”. Lo que muchas veces exhiben las redes, interpreta, es una batalla tribal agresiva entre quienes están a favor y en contra de un determinado tema: “En estas contiendas, las palabras son como granadas que explotan en la cabeza de los otros. Cuanto más gritás, más ocupàs centro de la escena”. Las redes, además, permiten a los líderes de opinión exacerbar y universalizar la polarización para su propio rédito. Si bien esta modalidad de tensionar los opuestos siempre ha sido parte del juego político, los extremos a los que se llega hoy dañan sensiblemente la calidad de la conversación pública. En suma, este nuevo espacio virtual a través del cual los jóvenes han entrado en la política tiene un impacto en la dinámica democrática, abunda Vilker. “Cambiando el estatus del espacio público, cambia el estatus de la democracia –enfatiza—. La cosa pública exige un compromiso más intenso que el que permite el escroleo, en donde todo es título, título, título, título”.