La candidata de la Coalición Ciudadana se enfoca en sus logros y critica las dificultades enfrentadas por otros

Medidas gubernamentales golpean con fuerza a muchos ciudadanos que apoyaron en el pasado al partido Pro.

Por InfoArticulos

Viernes 23 de Mayo de 2025 - 03:34

La candidata de la Coalición Ciudadana se enfoca en sus logros y critica las dificultades enfrentadas por otros. Foto: Redacción InfoArticulosLa candidata de la Coalición Ciudadana se enfoca en sus logros y critica las dificultades enfrentadas por otros. Foto: Redacción InfoArticulos

El peronismo se encuentra en una situación complicada, ya que la opción de una candidatura provincial está perdiendo fuerza. La mayoría cree que la variable 'con Cristina no alcanza' tiene más peso que la que dice 'sin Cristina no se puede'. Sin embargo, nadie logra inclinar la balanza. En el bando de los más dados por perdidos, Pro se desvive por acordar con LLA, mientras Milei y los suyos se divierten en negarse, mientras siguen pescando dirigentes y posibles candidatos competitivos todavía macristas. No les cuesta nada. Sobran los que se tiran sobre las redes. Por abajo, prosiguen las negociaciones entre libertarios y macristas, comandados por el negociador Cristian Ritondo, convertido en una especie de centauro que, en lugar de mitad humano, mitad caballo, es mitad amarillo, mitad violeta. Y la golpeada dirigencia de Pro prefiere ilusionarse con una interpretación benévola de la frase de Milei: 'Todo violeta. Ni una línea de amarillo'. Es la forma de negociar desde una posición dominante, dicen fuentes mileístas y macristas. El triunfo porteño envalentonó a los libertarios que quieren ir por el territorio bonaerense, pero saben que cualquier fuga de votos, por más pequeña que sea, como la que podría conservar una lista macrista, puede ser la diferencia entre una derrota y una victoria. Un triunfo le pavimentaría el camino de los sueños y despejaría sombras de un retorno kirchnerista, una de las grandes dudas que albergan los inversores. En el seno del macrismo más puro se impone ahora una posición que resumen así: 'No hay dudas sobre un acuerdo con LLA, pero debe incluir al radicalismo y a espacios vecinales. Nosotros asumimos que a nivel nacional LLA tiene más fortaleza y debe respetarse eso en la lista nacional, mientras que en provincia, donde tenemos territorio y gestión, el valor de los intendentes de Pro debe pesar para el armado y las candidaturas'. Se trata casi de un pliego de condiciones destinado a los libertarios y a los propios que ya se tiñen de violeta. Lo enarbolan dirigentes como Soledad Martínez, intendenta de Vicente López y primera voz de los primos Macri entre los jefes comunales, y el intendente de Pergamino, Javier Martínez, entre otros, que intentan hacer pesar en la negociación su poder territorial, frente a los sintierra violetas, que necesitan contar con algo más que la ola mileísta en la disputa provincial y en la crucial elección nacional. No será fácil lograr que les acepten todas las condiciones, aunque los armadores y estrategas mileístas emiten señales de la disposición a acordar, a pesar de la artillería verbal que en sentido contrario tiran sobre la agenda pública. Milei y los suyos potencian el viento a favor de su reciente triunfo y de la derrota amarilla con medidas que tocan el corazón de gran parte de los que son o han sido votantes y adherentes de Pro. El desafío es que llegue con el mismo brío a octubre.