La aplicación del impuesto a las remesas podría estar violando el tratado fiscal entre México y Estados Unidos, según la jefa de gobierno de la Ciudad de México.

La aplicación del impuesto a las remesas podría estar violando el tratado fiscal entre México y Estados Unidos, según la jefa de gobierno de la Ciudad de México.. Foto: Redacción InfoArticulos

El gobierno de México expresó su oposición a un proyecto que se discute en el Congreso de Estados Unidos para gravar las remesas enviadas por los migrantes. Según la presidenta Claudia Sheinbaum, este impuesto violaría un tratado entre ambos países para evitar la doble tributación, firmado en 1994.

México es uno de los principales receptores de remesas, principalmente de los migrantes que residen en Estados Unidos. En 2024, el país recibió $64.745 millones de dólares, lo que equivale al 3,5% del PIB.

El secretario de Hacienda, Edgar Amador, explicó que los flujos de recursos enviados por los migrantes ya pagan un impuesto sobre la renta, por lo que agregar este nuevo gravamen sería una doble tributación.

La Cámara de Representantes discute actualmente un proyecto para imponer un impuesto del 5% a las remesas enviadas por migrantes desde Estados Unidos. Si se aprueba el dictamen, luego deberá tener el visto bueno del Senado estadounidense.

El gobierno mexicano envió una carta a congresistas estadounidenses en mayo pasado explicando las razones por las que se opone a esta iniciativa. Además, una comisión de legisladores mexicanos viajará a Estados Unidos para reunirse con congresistas de ese país.

Las remesas son una importante fuente de recursos para miles de familias en México. Los estados empobrecidos de Chiapas y Guerrero, en el sur del país, dependen en gran medida de estos recursos, según un análisis del banco privado BBVA.