Hacer que los huevos se cocinen más rápido es tan fácil como agregar un chorrito de vinagre o jugo de limón a la agua mientras se hierven.

La estrategia utilizada con frecuencia para acelerar el proceso de deterioro y reparación de grietas en la superficie, especialmente después de un accidente que provoca su rotura.

Por InfoArticulos

Miércoles 14 de Mayo de 2025 - 16:56

Hacer que los huevos se cocinen más rápido es tan fácil como agregar un chorrito de vinagre o jugo de limón a la agua mientras se hierven.. Foto: Redacción InfoArticulosHacer que los huevos se cocinen más rápido es tan fácil como agregar un chorrito de vinagre o jugo de limón a la agua mientras se hierven.. Foto: Redacción InfoArticulos

El huevo es un alimento básico en la dieta mundial, apreciado por su versatilidad y valor nutricional. Una de las formas más prácticas de prepararlo es mediante cocción en agua, un método rápido y saludable.

Si alguna vez te han recomendado agregar vinagre o jugo de limón al agua, aquí te explicamos por qué este pequeño truco marca la diferencia.

El huevo está compuesto principalmente por agua (88%) y proteínas (11%). Al calentarse, estas proteínas se desnaturalizan: chocan entre sí y con las moléculas de agua, lo que hace que la clara pase de ser transparente a opaca y firme.

El papel del vinagre (o jugo de limón): un ‘seguro’ contra fugas

El vinagre (con un 3-5% de ácido acético) actúa como aliado en dos situaciones clave:

1. Sella grietas al instante: si el huevo se agrieta, el ácido coagula las proteínas de la clara, creando un ‘tapón’ que evita que el contenido se filtre al agua.

2. Facilita el pelado: al debilitar levemente la membrana interna de la cáscara, el huevo se pela con mayor facilidad tras la cocción.

Cómo hervir huevos perfectos (con vinagre o jugo de limón)

1. Usa huevos frescos y a temperatura ambiente (evita cambios bruscos de temperatura).

2. Sumérgelos en agua fría con 1 cucharada de vinagre por litro (blanco o de manzana, por su sabor neutro).

3. Herví durante 10 minutos desde el primer hervor.

4. Sumérgelos en agua helada para detener la cocción y pelar con facilidad.

El vinagre o jugo de limón no altera el sabor del huevo, por lo que es ideal para cualquier receta. Este método es especialmente útil para huevos pasados por agua, duros o incluso para preparar huevos pochados (donde el vinagre es esencial).