El presidente estadounidense comienza su visita al Golfo Pérsico con un recibimiento espléndido en el Reino de Arabia Saudita, donde busca cerrar importantes convenios comerciales.

El mandatario estadounidense también prevé tratar los problemas clave a nivel regional, como la contienda en Gaza, el desarrollo nuclear iraní y la situación del mercado de petróleo.

Por InfoArticulos

Martes 13 de Mayo de 2025 - 16:09

El presidente estadounidense comienza su visita al Golfo Pérsico con un recibimiento espléndido en el Reino de Arabia Saudita, donde busca cerrar importantes convenios comerciales.. Foto: RedacciónEl presidente estadounidense comienza su visita al Golfo Pérsico con un recibimiento espléndido en el Reino de Arabia Saudita, donde busca cerrar importantes convenios comerciales.. Foto: Redacción

El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, llegó a Arabia Saudita el sábado para una visita que busca reactivar la relación entre Washington y Riad, pero también ha generado polémica por su exclusión de Israel. La visita se centra en fortalecer las relaciones con los estados del Golfo, especialmente con Arabia Saudita, y buscar apoyo para la presencia militar estadounidense en el área. El objetivo principal es reactivar los esfuerzos para normalizar las relaciones entre Israel y Arabia Saudita, pero ese objetivo no parece inminente. Riad ha dejado claro que cualquier avance depende del establecimiento de un camino creíble hacia un estado palestino. La semana pasada, en un gesto significativo, Ben Salman recibió en Yeda al vicepresidente palestino Hussein Sheikh. El mensaje principal es que los gobiernos del Golfo son, hoy por hoy, aliados más estrechos de Trump que el actual gobierno de Israel. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, no fue informado de la reciente tregua entre Estados Unidos y los hutíes de Yemen hasta después del anuncio. Lo mismo ocurrió con las negociaciones nucleares con Irán y las conversaciones indirectas con Hamas. La exclusión de Israel en este viaje fue interpretada por analistas como un gesto político. El presidente Trump también ha aceptado utilizar un lujoso Boeing 747-8 ofrecido por la familia real de Qatar como reemplazo temporal del Air Force One, lo que generó críticas por un posible conflicto de intereses. La Constitución prohíbe aceptar regalos de gobiernos extranjeros. Trump desestimó las acusaciones y calificó de