El Papa Francisco recibirá un último homenaje de masas en los próximos días.
Por InfoArticulos
Sábado 26 de Abril de 2025 - 15:38
El Papa Francisco se prepara para un nuevo encuentro con la comunidad católica en una ceremonia religiosa.. Foto: Redacción InfoArticulos
Un grito de alegría resonó entre el aplauso continuado que acompañó a Francisco en su último paseo por las calles de Roma, desde la Basílica de San Pedro hasta la de Santa María la Mayor, donde fue enterrado.
A bordo del papamóvil, su féretro recorrió 4 kilómetros de la Ciudad Eterna, pasando por el icónico Coliseo romano y los Foros Imperiales.
"Grazie Francesco", rezaba una pancarta blanca con letras rojas gigantes que colgaba de un edificio frente a la Basílica donde fue enterrado el primer pontífice latinoamericano.
El aplauso dio paso al silencio cuando el féretro desapareció entre las puertas de la imponente iglesia del siglo V, situada en pleno corazón de Roma.
Una pareja lloraba serena sin apartar la mirada del templo.
"Fue muy conmovedor, muy triste como nos dejó", dijo María Vicente, una guatemalteca de 52 años, con los ojos vidriosos.
"Más normal, más humano"
Romina Cacciatore, de 48 años, llegó con su familia a las 6 de la mañana, siete horas antes de la llegada: querían un buen puesto para ver al papa.
Más allá de la nacionalidad argentina, también tienen una historia compartida.
El papa Francisco falleció el pasado 31 de marzo a los 85 años. Su funeral se celebró en la plaza de San Pedro, que congregó a 250.000 fieles.
Andrea Ugalde estuvo entre ellos. No durmió, llegó a la una de la mañana a uno de los accesos y corrió tan rápido como pudo para ubicarse «en primera fila».
"Fue una experiencia increíble, hermosa y humilde", dijo la mujer de 39 años, al terminar la ceremonia.
"Valió la pena no haber dormido", agregó Ugalde, que compró un boleto de Los Ángeles a Roma tan pronto como supo que el papa murió.
Miles de personas llenaron rápidamente la avenida, la plaza, los alrededores.
Muchos de los asistentes eran jóvenes peregrinos con banderas y estandartes sobre los hombros, mientras sacerdotes vestidos de gala se arremolinaban bajo las majestuosas columnatas de la famosa plaza de Bernini.
Algunos dolientes rezaban rosarios y oraciones en silencio. Otros posaban para fotos con camisetas con el rostro del papa y una paloma, y la Basílica de fondo.
"Era un santo en vida", expresó Gabriela Bracamonte, que viajó desde Argentina con un grupo de fieles por la canonización suspendida de Carlo Acutis, el primer santo milenial.
"Vino a hacer una revolución en la Iglesia católica", agregó esta mujer que llevaba una bandera argentina amarrada del cuello.
Ugalde coincidió: El papa «es la definición de un ser humano».