Detalles sobre la situación actual del conclave

Detalles sobre la situación actual del conclave. Foto: Redacción InfoArticulos

Los cardenales de todo el mundo se reúnen en la Capilla Sixtina, una joya renacentista adornada con los famosos frescos de Miguel Ángel, para elegir al nuevo líder de la Iglesia católica tras la muerte del papa Francisco.

Esta reunión tiene sus raíces en la Edad Media, cuando la idea de elegir a un soberano era una revolución en sí misma.

Y esta reunión está cargada de misticismo porque sus participantes juran guardar secreto de por vida.

A continuación, algunos datos del cónclave que sustituirá al primer pontífice latinoamericano.

El cónclave comienza el miércoles 7 de mayo y solo termina con la elección de un nuevo papa.

Los cardenales celebran cuatro votaciones al día -dos por la mañana y dos por la tarde- hasta que un candidato obtiene dos tercios de los votos.

Las papeletas y las notas tomadas por los cardenales se queman en una estufa cada dos rondas de votación.

La chimenea, visible para los fieles desde la plaza de San Pedro, expulsa humo negro si no se logra escoger a ningún papa y una fumata blanca en caso de una elección.

Cualquier hombre católico adulto puede ser elegido papa, aunque en la práctica casi siempre es uno de los cardenales, con solo seis excepciones en la historia.

El cardenal elegido deberá responder a dos preguntas del decano: «¿Aceptas tu elección canónica para Sumo Pontífice?» y «¿Cómo quieres ser llamado?».

Si responde sí a la primera, se convierte en papa y obispo de Roma.

El nuevo pontífice se retira a una habitación conocida como la Sala de las lágrimas para ponerse el traje papal.

Desde el balcón de la basílica de San Pedro, el cardenal protodiácono anuncia «Habemus papam».

A continuación, aparece el nuevo pontífice e imparte su bendición «urbi et orbi» (A la ciudad y al mundo).