Este pájaro pesa entre 35 y 45 gramos, tiene plumas color gris oscuro, dorso marrón, ojos rojos y finas motas blancas en la parte trasera del cuerpo.
Por InfoArticulos
Jueves 27 de Febrero de 2025 - 15:04
Un hallazgo inédito en la historia del mundo natural ha sido descubierto, después de más de dos siglos sin avistamientos, un ave que se creía extinta fue encontrada.. Foto: Redacción InfoArticulo
Un grupo de científicos ha realizado un sorprendente hallazgo en Ecuador: han descubierto una especie de ave terrestre que se creía extinta hace casi 200 años. El descubrimiento ocurrió en la isla Floreana, del archipiélago ecuatoriano de las Galápagos, según anunció la Fundación Charles Darwin (FCD).
El "redescubrimiento" del pachay de Galápagos (laterallus spilonota) marca "el primer registro oficial de la especie en la isla Floreana desde que Charles Darwin la documentó por primera vez en su visita de 1835", según informó la institución científica, ya que existen registros más recientes de la misma en otras islas del archipiélago, situado en el océano Pacífico, a unos mil kilómetros de las costas continentales de Ecuador.
Para la fundación, este redescubrimiento es un gran avance para el proyecto de Restauración de Floreana, que había identificado al pachay de Galápagos como una de las 12 especies localmente extintas destinadas a la reintroducción.
Este hallazgo ocurrió después de que, a finales de 2023, se implementó la campaña de dispersión de cebo para la erradicación de especies invasoras a gran escala, liderada por la Dirección del Parque Nacional Galápagos y la Fundación de Conservación Jocotoco, con el apoyo de Island Conservation y otros socios. Finalmente, la campaña eliminó con éxito la mayoría de los gatos ferales y roedores de la isla.
El pachay de Galápagos es una ave pequeña que pesa entre 35 y 45 gramos, tiene plumas color gris oscuro, dorso marrón, ojos rojos y finas motas blancas en la parte trasera del cuerpo.
Estos pájaros juveniles son mayormente grises y carecen de las motas blancas. Clasificado como "vulnerable" por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, actualmente se encuentra en las islas Fernandina, Isabela, Pinta, Pinzón, Santa Cruz y Santiago.
Es un ave esquiva que suele esconderse en donde hay mucha vegetación, como pastizales altos y matorrales. Emite una variedad de vocalizaciones, incluidos chasquidos, chirridos y traqueteos prolongados.
Durante su más reciente expedición anual de monitoreo de aves terrestres en la isla Floreana, los investigadores de la Fundación Charles Darwin y guardaparques del Parque Nacional Galápagos registraron la presencia del ave en tres zonas distintas dentro de la zona de transición de Floreana, un pastizal cubierto de árboles de guayaba, lejos de lugares agrícolas.